miércoles, 6 de mayo de 2009

El tejo de Bermiego


"La soledad era eterna
y el silencio inacabable.
Me detuve como un árbol
y oí hablar a los árboles".
(Juan Ramón Jiménez).



Como el 3 de Mayo era el día de la Madre pues me decidí a organizar este pequeño pasein con la familia para que conocieran el majestuoso Texu de Bermiego, y por supuesto como siempre acompañado de una buena pitanza en uno de mis sitios favoritos en Quiros, más concretamente en Barzana, el afamado Casa Jamallo.
Como mi madre estuvo aguantandonos y traballando con nosotros toda la vida, pues la hicimos el 1 de mayo, día del trabajador.
Es una pena que este árbol que es el Tejo más longevo de Europa y Monumento Natural en Asturias, sea conocido hoy en día por tan pocos asturianos estando tan cerca de las tres grandes ciudades de Asturias.
Para llegar a Bermiego pues nada sencillísimo, cogemos la autopista en dirección a Grado, salimos en Trubia, paramos a tomar un cafetín en Proaza y un poco antes de llegar a Barzana ya vemos una desviación a la izquierda que nos indica a Bermiego (no tiene ninguna perdida).
El texo esta justamente a las afueras del pueblo junto al cementerio y la iglesia de Santa María de Bermiego que data del siglo XV (el texo es muchísimo anterior a la iglesia), y presenta una nave única con cubierta de madera.
Hacia las doce de la mañana y con un estupendo día de sol dejamos el coche justo a la entrada del pueblo donde nos recibió un burrin que pacía tranquilamente en el prao al lado del coche.
Cogemos una caleya que se adentra en el pueblín cuando ya podemos ver algunas chimeneas que empiezan a afumar entre los últimos tejados del pueblo, síntoma de que ya están empezando a preparar los famosos potes de la zona que tanto nos gustan para la hora del almuerzo, las casas se alternan ya por el camino con algunas fachadas y balcones pintadas de colorinos, muchas de las cuales cuentan con unos hermosos corredores bien orientados al sol y muy bien conservados.
El silencio de las caleyas del pueblin solo se rompía por el ladrido de algunos perros que le decían a Pachu, que es el perro de mi hermana que tuviera cuidado que estaba en pueblo ajeno.
Seguimos caminando y comentando el lugar tranquilamente y al poco nos situamos en la plaza del pueblo, con su fuente su lavadero y unos bancos para el que quiera descansar o sentarse o echar una parrafada con la amable gente del pueblo de Bermiego, una indicación en una tablilla de madera y pintado a brocha gorda nos indica el camino a seguir para llegar al único bar-tienda del pueblo.

Bermiego, desde la parte más alta del pueblo.



Una casa típica de Bermiego con su corredor.






Varias fotos del pueblo de Bermiego y en esta última unas gallinas dando un pasein por el pueblo.


Poco a poco nos vamos adentrando más en el pueblo atravesando las cosas y las cuadras con los tradicionales huertos en miniatura con sus lechugas, tomates y cebollas, solo hace falta salir de casa en bata y zapatillas y coger lo que se necesite, que envidia, decía mi cuñado.
El camino ahora se alarga espacioso entre los matos por un camino bien en cementado y a lo lejos ya podemos contemplar el majestuoso Texo, la verdad que desde esta zona ya resulta impresionante. el porte de tal majestuoso árbol.
Seguimos por dicho camino y acometemos la única pequeña subida de todo el camino que la realizamos sin ninguna dificultad, llegamos a la parte más alta donde también hay una fuente y un banco para descansar, desde aquí podemos ver unas increíbles panorámicas de Las Ubiñas al fondo, un poco por delante Peña Rueda todavía totalmente nevada y justo enfrente nuestro podemos contemplar Toriezo y el Pico Gorrión.
Una vez descendida esta pequeñísima loma llegamos al cementerio del pueblo y ya encontramos un panel indicativo que nos habla un poco del famoso Texo de Bermiego, abrimos una pequeña portilla de madera que impide la entrada del ganado al Campo Santo y de repente se hizo un silencio sepulcral al ver el tamaño y la majestuosidad del famoso Texo de Bermiego.
Este tejo también lo llaman el Teixu líglesia, es un tejo milenario y fue declarado monumento natural el 27 de Abril de 1995, tiene una copa que mide 15 metros, una altura de 10 metros y un tronco de unos 8 metros de perímetro, esta considerado el tejo más antiguo de Europa. y ha ganado el premio de la ONG "Bosques sin Fronteras" y el del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino de "árbol más longevo"

El Tejo
Su madera incomparable viene utilizandose desde el neolítico para un sinfín de usos, se sabe que se empleaban palas de este material para la extracción del cobre en las minas. Los mejores arcos eran los de tejo. También fue madera muy apreciada por su resistencia y duración, a la intemperie, decían los asturianos que dura más que una barra de hierro. Desfila las herramientas con la que se trabaja.
En algunas partes de Asturias se les ponía una traba de tejo en la boca de los cabritillos para permitirles comer hierba pero no mamar y decían que solo sirve el tejo porque otras maderas las roen.
También las antiguas gaitas se hacían con este material, a causa de su extrema dureza, suele labrarse o serrarse en verde, pues al secarse no mengua, y de esta forma se trabaja mucho mejor.
Las actuales poblaciones en Asturias son residuos de las antiguas, mucho más extensas, y como repetidamente han señalado diversos autores, este árbol ha dejado su huella en la toponimia de muchos lugares donde hace tiempo que ya no existen gracias a la mando del hombre.
Algunos avicultores utilizaban su fruto para el engorde de las gallinas, en Somiedo utilizan las hojas en forma de vahos para abrir las vías respiratorias de los animales con problemas de este tipo.
Se usó también como antídoto contra las mordeduras de víbora, contra la rabia y como abortivo, aunque su uso es peligroso, controlando la dosis puede servir para estimular la actividad cardiaca y elevar la tensión.
En Bermiego como en muchos otro pueblos Astures este árbol era muy venerado, a su alrededor se hacían las reuniones (conceyos) después de la misa, cuando el alcalde así lo requería para tratar asuntos vecinales.
La costumbre de celebrar el coceyu bajo el tejo fue común en muchas partes de Asturias podemos nombrar otros tejos de conceyu en Pedroveya, la Rebellada, Villamar, Tiñana, Cenero, el Condado....
Al son de la campana, el tejo reúne a su gente, los vecinos del pueblo o pueblos que pertenecen a su parroquia y se van congregando bajo su copa.
Alrededor del teixo se celebraba la asamblea, el concejo abierto donde la gente tomaba decisiones y se hacían los juicios.
También era el teixo centro de la fiesta del pueblo, bajo su copa tocaban los músicos y a su alrededor bailaban los paisanos, cuando salían de la iglesia, después de rendir culto a su santo patrón.
En Pola de Somiedo hubo uno de estos tejos festivos, donde el centro de la plaza bendecía el pueblo y sus campos, hasta que los listos del Ayuntamiento lo sentenciaron al ser talado. El delito del pobre Tejo fue que obstaculizaba el paso de camiones en la plaza (hay que joderse, que vergüenza).



Todos nos hicimos unas fotos con la gran madraza y el Texu de Bermiego.



Aunque por suerte este Tejo se encuentra en muy buen estado lo que no podemos olvidar es el estado de nuestros árboles como contaba hace poco Ignacio Abella en una carta publicada en la Nueva España, más o menos y con toda razón venía a decir que la situación de los tejos es totalmente lamentable, arrancados, abandonados, en cementados, hormigonados.... no se puede hacer peor, y lo triste de todo esto es que tenemos un Plan de Manejo del Tejo que como casi todos los planes del señor Tinin Areces no sirve absolutamente para nada porque las ganas de llevarlo a cabo parecen no existir vista la situación de los mismos, a los ciudadanos solo nos queda eso, denunciar la poca responsabilidad y la dejadez total de la administración asturiana.
Como dice Ignacio Abella el señor Areces está más interesado en los grandes proyectos faraónicos que en la conservación del patrimonio asturiano.
Hasta que esto suceda, continuaremos lamentándonos de los malos tiempos que corren para los árboles y -a este ritmo- en unas pocas décadas habremos dilapidado una herencia que por su propia naturaleza debiera perdurar aún por siglos.
A principios del presente año se derrumbaba la gigantesca Fayona de Eirós y pocos días después se desgajó una gran parte del tejo de Pastur; eran dos de los diez árboles declarados monumentales por el Principado y como se ve no les importa absolutamente nada su protección.


Ignacio Abella
La memoria del bosque

Este es el sugerente título del último libro de Ignacio Abella de los que yo e sacado todos los datos que pongo aquí sobre el Tejo,
Tuve la gran suerte y el privilegio de asistir (gracias a Silvia) a la presentación que se realizó el año pasado en el Foro Abierto de la Librería Cervantes de Oviedo donde Ignacio Abella me dedicó muy amablemente el libro y pudimos charlar un buen rato sobre los árboles de Asturias.
El libro es verdaderamente impresionante yo lo recomiendo a todos aquellos que les guste los árboles, los bosques y la naturaleza en general, todo el está lleno de preciosas fotos y magníficos textos.
En el libro hay algunas fotos en los que aparecen, al lado de los árboles niños y niñas jugando, plantando… En ellos está el futuro y es responsabilidad nuestra transmitir lo poco que sabemos y en este libro podemos apoyarnos para iniciar la aventura de vivir el bosque.

Pablo Lara.
Tiempo del paseo: 1 hora (ida y vuelta).


Mi madre mi hermana y Pachu, su perro de aguas en el antiguo molino del pueblo.


El mi cuñain, con cara de incrédulo al ver la pinta y el tamaño de las raciones del corderin al horno.


La pitanza

Después de completar el magnífico paseo mañanero que nos aviamos dado, pues ya llegaba la hora de la fame y antes de comer en Casa Jamallo fuimos a tomar un vinin los cuatro hasta un bar-tienda llamado El Rubio, que está situado en Santa Marina a unos tres kilómetros de Barzana, un sitio de verdad digno de conocer porque está puesto con un gran gusto, el local esta reformado totalmente y en la pate trasera pusieron una tiendina en plan antiguo preciosa, la bodega del local que por cierto tiene una carta de vinos que ya quisieran muchos locales de Gijón la colocaron en una boca mina de carbón que había en este local antiguamente y que una vez reformada les quedo preciosa.
No nos quedamos a comer porque teníamos reservado en Jamallo pero espero comentar dentro de poco esté sitio porque tenía una carta muy apetecible, nosotros tomamos unos Riveras del Duero acompaña de una tabla de quesos asturianos que yo le doy un aprobado muy alto.

Casa Jamallo
Como decía al principio uno de mis sitios favoritos para comer como un paisano y disfrutar de una buena comida de guisanderas, con los amigos o la familia en Quiros es sin lugar a dudas Casa Jamallo.
Aunque esta vez no lo pedimos para mi tienen el mejor pote de castañas de toda esta zona (por no decir Asturias).
Cuando se habla de Casa Jamallo se habla de una casa de comidas de siempre, de trato amable y de buen comer tanto sus famosos potes su gran calidad en la caza y su buen cordero sin olvidarse de la buena calidad-precio.
Como ya veníamos de tomar un poquitin de quesu pues fuimos directamente al grano y pedimos unas paletillas de cordero acompañado de unas buenas ensaladas y por supuesto que no falte el pan de encanda de la zona, que por cierto el que sobro no lo guardaron para llevar para casa, para mí un buen detalle, una botellina de buen reserva rioja, unos buenos postres, y el cafetín y el chupito lo tomamos en la terraza debajo de un hórreo en una bodega que tienen situada en la planta de abajo.
Sin más un sitio que nunca defrauda y que uno se encuentra comiendo como en casa.